El ex jugador e ídolo de Club Deportes La Serena, Mauricio Salazar, está siendo acusado de estafa por sus ex socios, el también ex futbolista papayero Marcelo Caro y el empresario minero Raúl Arellano. La persecución legal fue iniciada por Arellano, quien, desconcertado al ver que no pdoía recuperar su inversión de $100 millones de pesos, entabló demandas civiles y penales sobre ambos deportistas.
La historia comienza cuando Salazar y Caro, a punto de «colgar sus botines» decidieron pensar en qué sería de ellos lejos del fútbol, por lo que formaron la sociedad SyC, para así invertir en negocios que les dieron buenos réditos, siendo elegidas las franquicias de gimnasios Energy y la cadena de comida rápida Johnny Rockets. Posteriormente, a ellos se les unió Arellano.
Todo era felicidad para este trío, que se hacían llamar «Los Tres Mosqueteros» como señala Allerano. No obstante, según el empresario minero, cada vez los futbolistas eran más herméticos en cuanto a la rendición de cuentas de la sociedad, por lo que decidió investigar y, en sus palabras, se habría percatado de que existían repartos de dinero entre Salazar y Caro que él desconocía. Esto lo llevó a pedir su salida de la sociedad, puesto que comenzó a ver fuertemente mermado su patrimonio.
Otro afectado por los posibles dolosos manejos de la sociedad fue el ex seleccionado chileno Jorge «Potencia» Vargas, quien perdió $500 millones de pesos que invirtió en la sociedad SyC.
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Esta nota describe un proceso judicial en curso. La información fue obtenida a través de fuentes periodísticas, sin embargo, no se debe considerar a las personas imputadas como culpables hasta que la Justicia dice sentencia.
Todo esto basado en el Artículo 4 del Código Procesal Penal.